Paisajes de leyenda: la naturaleza como fuente de inspiración
El turismo rural es una de las opciones más interesantes para descubrir nuevos lugares, desconectar de la rutina y disfrutar de la naturaleza en todo su esplendor. Para aquellos que buscan una experiencia única rodeados de paisajes de ensueño, España es sin duda uno de los destinos favoritos. En este artículo nos sumergimos en la belleza natural que ofrece el país, descubriendo algunos de los paisajes más impresionantes que podemos encontrar.
El Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido
Ubicado en el Pirineo aragonés, el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido es una de las joyas naturales más valiosas de España. Este espacio protegido cuenta con más de 15.000 hectáreas llenas de ríos, cascadas, bosques y cumbres que alcanzan los 3.000 metros de altura. El Monte Perdido es el punto culminante del parque, por lo que es una parada obligatoria para aquellos que aman el senderismo y la montaña.
La Sierra de Grazalema
Andalucía también nos ofrece una amplia variedad de paisajes naturales que quitan el aliento. La Sierra de Grazalema, ubicada entre las provincias de Cádiz y Málaga, es un ejemplo claro de ello. Esta impresionante reserva de la biosfera cuenta con ríos, cascadas, montañas y cuevas, así como con una amplia variedad de fauna y flora autóctona. Un lugar perfecto para quienes les gusta practicar deportes al aire libre como el senderismo, la escalada o el barranquismo.
El Parque Natural de las Dunas de Corrubedo
Situado en la provincia de A Coruña, Galicia, este paraje natural es ideal para los amantes del mar, la costa y los grandes espacios abiertos. Las Dunas de Corrubedo es un espacio natural protegido de 10 kilómetros cuadrados, donde podemos encontrar dunas móviles, lagunas y una gran variedad de especies vegetales y animales. Además, la playa de la Ladeira, que forma parte del parque natural, es una de las playas más bonitas de Galicia.
El Parque Nacional de los Picos de Europa
Este parque nacional es uno de los más visitados de España y no es para menos. Situado en la Cordillera Cantábrica, cuenta con una extensión de más de 60.000 hectáreas, llenas de paisajes espectaculares como lagos, ríos, montañas y bosques. Si queremos disfrutar de las mejores vistas, el mirador del Cable es uno de los lugares más populares del parque, desde donde se pueden apreciar las montañas de los Picos de Europa.
El Parque Natural de la Sierra de Cazorla
En la provincia de Jaén encontramos uno de los espacios naturales más importantes de la península ibérica, la Sierra de Cazorla. Este parque natural es el más grande de España y el segundo más grande de Europa, con una superficie de más de 200.000 hectáreas. En su interior encontramos montañas, bosques, ríos y cascadas, así como una variada fauna y flora. Además, es el hogar de una de las especies más emblemáticas del país, el lince ibérico.
El Parque Nacional de Timanfaya
En la isla de Lanzarote, en las Islas Canarias, encontramos un espacio natural protegido que pareciera sacado de otro planeta. El Parque Nacional de Timanfaya cuenta con paisajes volcánicos desérticos, en los que podemos encontrar cráteres, coladas de lava, fumarolas y más de 100 especies de plantas autóctonas. Un lugar que nos transporta a otro mundo y nos demuestra la increíble diversidad de España.
La Cascada de Nocedo
En la provincia de León se encuentra uno de los parajes más bonitos del país, la Cascada de Nocedo. Situada en pleno Valle del Silencio, se trata de una cascada de 15 metros de altura, rodeada de bosques autóctonos y de una rica fauna y flora. Un lugar idóneo para aquellos que disfrutan del senderismo y de las rutas de montaña.
Conclusión
Es difícil elegir entre todos los paisajes que ofrece España, pero si hay algo seguro es que la naturaleza es una de las principales fuentes de inspiración del país. Desde paisajes montañosos, hasta playas vírgenes, pasando por paisajes volcánicos o bosques autóctonos, la variedad en España es simplemente impresionante. El turismo rural nos permite disfrutar de estos lugares en todo su esplendor, permitiéndonos desconectar de la rutina y sumergirnos en la belleza de la naturaleza en estado puro.
